El 'caso Alves' y el machismo de la prensa deportiva
Pero, como bien dice la periodista Laia Mauri Baraza, que sea divertido, alegre o amable es completamente irrelevante. Siempre nos resulta sorprendente que un violador sea un ‘buen chico’ pero es que la gran mayoría no se adapta al estereotipo de un personaje oscuro, inadaptado y con poco “éxito” en el ligue. Muy probablemente la mayoría comete este tipo de barbaridades porque piensan que pueden hacerlo impunemente y utilizan su poder para aprovecharse de una mujer.
El debate en las redes sociales en torno al ‘caso Alves’ ha sido fascinante y a veces repulsivo por la cantidad de comentarios machistas que apuntaban hacia la víctima como una persona que está buscando ganar fama y dinero. Como muchas otras mujeres violadas, la chica tuvo que renunciar a la indemnización para no perder credibilidad. Muchos casos como el de Cristiano Ronaldo han terminado favorablemente para las superestrellas gracias a las millonarias indemnizaciones ofrecidas.
Entre mis amistades culers catalanas la condena de Alves ha sido unánime. No creo que ninguno defienda al exjugador del Barça, niegue la gravedad de las acusaciones o desacredite a la víctima. Sin embargo, las reacciones de muchos barcelonistas polacos han sido muy diferentes. He leído bastantes ‘posts’ defendiendo al brasileño y acusando a la joven de mentir. Debo admitir que no me ha sorprendido esta diferencia pero sí me ha decepcionado que el pensamiento machista sea tan común entre mis compatriotas.
De todas maneras, lo más alarmante es que la prensa deportiva como el ‘Sport’ barcelonés intente blanquear la imagen de Dani Alves a través de una multitud de artículos que hablan de su trayectoria deportiva ejemplar, su vida familiar o que lo compadecen directamente. Por ejemplo, el ‘Sport’ entrevistó a la ex mujer del futbolista Dinorah Santana y eligió el siguiente titular: “Dani está triste, hay cosas que no le gustan”. Con el beneplácito del periódico la ex pareja de Alves suelta varias perlas como “le conozco y es incapaz de deshonrar a una mujer”. Si para ella acabar violada equivale a perder el honor, demuestra aún más lo patriarcal que puede ser el entorno del acusado.
Además de las respuestas de Dinorah Santana, sorprenden las preguntas tendenciosas del periodista Albert Masnou como la que define a Alves como una “diana fácil” por ser famoso o si su ex mujer tiene ganas de abrazar a “Dani” - siempre utiliza el diminutivo cariñoso. El periodista claramente intenta conmover a los y las lectoras con otras preguntas como “¿han llorado mucho los niños?”. El hecho de que, según Dinorah Santana, Alves trate a cada mujer como “una reina” de ninguna manera demuestra que sea libre de machismo, más bien todo lo contrario.
El ‘caso Alves’ ha sido una decepción muy desagradable para alguien como yo que admiraba al brasileño como jugador y sonreía viendo la alegría que desprendía en el campo y los entrenamientos. Se demuestra una vez más que el estereotipo de violador como un monstruo de los márgenes de la sociedad es absolutamente falso y sólo sirve para desviar la atención de la gravedad del problema. Los llamados ‘depredadores sexuales’ son a menudo hombres exitosos que se sienten impunes gracias a su posición privilegiada que aprovechan para ejercer su poder sobre las mujeres.
Para acabar, quiero decir que no tengo motivos para no creerle a la víctima y defender al ídolo caído del barcelonismo. Para empezar, las pruebas son muy contundentes. Además, como bien dijo el juez Joaquim Bosch, las acusaciones de violencia de género falsas constituyen menos de un por ciento de la totalidad. Si alguien todavía tiene dudas o defiende a Dani Alves, debería hacérselo mirar.
La imagen del texto proviene del 'Sport'
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